La primera obra de
arquitectura moderna dedicada en Cuba a la campaña de alfabetización, se
levantó en la ciudad de Camagüey, durante la remodelación del Casino Campestre,
realizada en la medianía de la década de 1970.
El arquitecto
Wilfredo Rodríguez Ramos, presidente en Camagüey del departamento de
Documentación y Conservación del Movimiento
Moderno, (Do.Co.-Mo.Mo), explica que esa obra, dotada de elementos
históricos, naturales y contemporáneos, es un ejemplo de esa corriente del
movimiento internacional que entre arquitectos, constructores e historiadores
se encamina a proteger aquellos elementos de la arquitectura presente.
Camagüey ocupó la
vanguardia de ese movimiento en el país, al organizar este grupo de
Documentación y Conservación en 1998, desarrollando desde entonces un
levantamiento de obras del patrimonio perteneciente al movimiento de la
arquitectura moderna.
Propuestas
para su conservación como Monumento Local, se encuentran la Escuela Profesional de Comercio,
el Auditórium Iván Hidalgo Funes y el Hospital Clínico Quirúrgico Amalia
Simoni, antes Hospital Provincial Antituberculoso.
En
el inventario de elementos a preservar se hallan además la parada y cerca perimetral del Hospital
Psiquiátrico René Vallejo, la
farmacia de Avellaneda y San Esteban, antigua Alvarez Fuentes; el estadio de béisbol de Camagüey; los edificios gemelos, únicos de su
tipo en el país, situados en las esquinas, uno de Hospital y Hermanos
Agüero y el otro en Lope Recio y Popular y el palomar del Casino Campestre,
realizado como homenaje a la Campaña Nacional de Alfabetización.
Foto: Eduardo Labrada Rodríguez
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ResponderEliminarMi intromisión es para decir, a la distancia, que lo que se quiere conservar es un edificio, de alguna manera histórico, y no aquella historia que afeó su pasado. Son puntos de vista, si fuera por cada felonía que ha sucedido en tal o cual sitio, del país que fuera, no quedarían paredes en pie. Un abrazo
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