El corazón de Camagüey rejuvenece

Los años de mi adolescencia y juventud estuvieron muy relacionados con la céntrica Calle Maceo, popularmente conocida como Del comercio, por concentrar desde tiempos inmemoriales los establecimientos comerciales más importantes de Camagüey.
La nueva vida de la Calle Maceo
Recorrido a pie de obra

Restauran edificio La Gran Antilla

Mis primeros paseos lejos de la casa, mis primeras novias, el sabroso helado Coppelia y hasta las primeras fiestas bailables están muy relacionadas con esta querida zona, imborrable en mis recuerdos de las décadas de los 60 y 70 del siglo pasado.

Por eso hoy me alegran las transformaciones que allí ocurren.  Ahora la céntrica vía está prácticamente intransitable, con mucho polvo, escombros y el constante ir y venir de los obreros,  que prácticamente bloquean la mayoría de las tiendas de productos industriales.

Esta situación temporal molesta a algunos citadinos, que no comprenden la urgente necesidad de restaurar la senda, que a pesar de su estrechez resulta más concurrida de la capital provincial, verdadero corazón de los legítimos camagüeyanos, quienes en pocos meses la veremos totalmente transformada, para disfrute de nosotros y también de los visitantes foráneos.

Los trabajos….

La transformación incluye los centros comerciales, culturales y turísticos radicados en la corta vía, delimitada por las Plazas de Maceo y de la Solidaridad, aunque comúnmente conocida como la Plaza del Gallo, por los lugareños.

La Oficina del Historiador de la Ciudad de Camagüey, (OHCC), es la rectora las labores constructivas y de reanimación, que no sólo tendrán un mejoramiento estético, sino que  favorecerán también la calidad de los servicios.

Todos los sistemas que se instalan son de novedosa tecnología, soterrados, con materiales más duraderos, y con el incremento  de las capacidades antes instaladas, en algunos casos duplicadas. 

También mejorarán los sistemas de acueducto y de abasto de agua, alcantarillados, redes eléctricas, transmisión de datos y telefonía y los sistemas de audio local, y se introducen nuevas tecnologías.

Técnicamente no será un bulevar, algo difícil de borrar para las mentes de los lugareños, deseosos de contar con uno, como en el resto de las capitales de provincias…

Construyen una terraza, que no es boulevard, según el concepto de calle peatonal, con  acciones que incluyen la demolición de las aceras y de la calle para obtener un solo nivel, con pavimento de "granito" corrido en una combinación de tres colores; pero se mantienen los motivos decorativos que han distinguido la vía, y  se colocarán jardineras que mejoraran sustancialmente la imagen.

Una nueva iluminación también, novedosa en el país para este tipo de intervención, colmará las expectativas de los camagüeyanos y los visitantes.

Igualmente participarán los creadores de las artes plásticas en las obras de la calle y en  el rediseño de la Plaza de la Solidaridad, atendiendo a las características  distintivas de la ciudad como las denominaciones, indistintamente de: «Ciudad de las Iglesias», «Ciudad de los Tinajones», y el gentilicio de «agramontinos», que identifica también a los ciudadanos de esta provincia.

Serán creadas tres circunferencias en distintos puntos de la calle, en alegoría a esos elementos  que  tipifican a la ciudad. Esas obras se convocaron a concurso entre los artistas, para seleccionar los mejores proyectos, y perpetuar la huella generacional de los creadores camagüeyanos.

Los trabajos incluyen la reconstrucción total de algunos locales actuales, la remodelación o transformación parcial de otros, la reactivación de inmuebles cerrados, y nuevas opciones con  un restaurante, un piano-bar, una cafetería con ambientación de temas deportivos, el café-literario en la librería Antonio Suárez y  la  apertura de servicios en  la segunda planta de la Heladería Coppelia.

Elementos nuevos serán  la construcción de un hostal en el viejo edificio conocido como «Camino de Hierro», que marca la singular geometría de la Plaza de la Solidaridad; y un anfiteatro en el parque aledaño, con  absolutos y sustanciales cambios en el espacio público y con las opciones recreativas y culturales para la población.

La Calle Maceo, en el centro histórico urbano de Camagüey, deberá estar lista totalmente para el verano del venidero año; y en noviembre próximo  el primer tramo, que comprende desde la Plaza de Maceo hasta la intersección con General Gómez.

La Calle Maceo es uno  de los accesos más concurridos a la antigua Plaza de la Soledad; y en la década de 1950, su imagen de principal arteria comercial, se convirtió en reto  para las más lujosas  tiendas de la capital del país.

En esa época fue también la primera, fuera de La Habana, con sus conexiones eléctricas y telefónicas soterradas; y además, sus aceras, eran las únicas de la Isla,  totalmente construidas de granito corrido.

Hoy, los desafíos del tiempo, y las condiciones de la vida moderna imponen la reanimación de la populosa arteria comercial, con nuevos valores estéticos y funcionales.

Al ambicioso proyecto, se suma, una vez terminada la reanimación de las dos cuadras de la calle, el inicio de la ejecución civil del Teatro Avellaneda, con la participación, como ahora,  de otros organismos y entidades;  encabezados por las fuerzas de la Empresa Provincial de Restauración y Conservación de la Oficina del Historiador de la Ciudad.

Al final, hasta los más escépticos comprenderían lo necesario de las actuales molestias, de los gastos materiales aún en tiempos de crisis económica, y del esfuerzo organizado, que implica transformar el corazón de los camagüeyanos, obra colosal, que una vez concluida será necesaria mantener con la dedicación de todos.

Fotos de Rodolfo Blanco Cue