Daylis Suárez Escobar,
especialista comercial del complejo Gran Hotel – Colón Informó que otra de las
facilidades será la apertura de un baño unisex para discapacitados en el lobby.
La tienda de la cadena
Caracol existente dentro del recinto hotelero tendrá mayor área comercial y
crearán una específica para venta de puros Habanos y cigarros.
Ubicado en el centro
histórico de ciudad, el Colón, está entre los alojamientos de mayor preferencia
del turista foráneo, no solo por el sitio donde fue erigido sino también por el
exquisito buen gusto y su excelente cocina internacional.
El alojamiento se encuentra
en la calle República, una de las principales arterias de la colonial ciudad,
dentro de su centro histórico, y es una refinada instalación inaugurada en
1926, que hace gala de un imponente trabajo en maderas preciosas en su bar y de
un meticuloso diseño decorativo.
Sus habitaciones tienen aire
acondicionado, baño, radio y TV por satélite, y los visitantes disponen también
de restaurante, cafetería, bar, servicio de correo, caja de seguridad y buró de
turismo.
Desde el hotel se puede
acceder a puntos de interés turísticos como el callejón Funda del Catre, la
calle más estrecha de Cuba; el Cementerio General de Puerto Príncipe que data
de 1814, plazas e iglesias antiguas y el Museo Ignacio Agramonte, uno de los
más grandes e integrales de Cuba.
A través del buró de turismo
del hotel Colón el visitante puede planificar recorridos a pie o en bicitaxis
(un triciclo que puede llevar hasta 2 pasajeros) por Camagüey, porque no es
necesario ningún transporte automotor para apreciar sus encantos, sus calles
tortuosas y sus centenarias edificaciones.
Camagüey estuvo entre las
ciudades más importantes en el periodo colonial. Al recorrer las calles de la
vieja villa señorial se pueden apreciar verdaderas maravillas arquitectónicas
de refinado estilo barroco, principalmente sus iglesias. Muchos la califican
como una de las urbes más lindas de Cuba, llena de tesoros arquitectónicos.
Es confortable una estancia
en la pintoresca Plaza San Juan de Dios con sus calles empedradas y rodeada por
edificios de una planta pintados de vivos colores y una iglesia amarrilla al
lado del también restaurado edificio que fuera la sede de un antiguo hospital.
En distintos
establecimientos de la ciudad e incluso en el propio Hotel Colón se pueden
adquirir tinajones en miniatura, emblema de la región, porque la otrora villa
nació del barro, utilizado en la fabricación de ladrillos con los que se
levantaron las primeras viviendas y se moldearon los tinajones, especie de
tinaja árabe de gran tamaño utilizado para acopiar agua de lluvia, de los
cuales llegaron a existir alrededor de 16 000 en toda la ciudad a principios
del siglo XX.
La provincia (la de mayor en
extensión de Cuba), tiene asimismo sus encantos en sus costas, en las que se
localizan la mayor cantidad de cayos e islotes que conforman el archipiélago
cubano y más de 120 kilómetros de hermosas playas.
Fotos: Cortesía del Hotel Colón
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