El V Congreso de la Asociación Culinaria de esta provincia (ACC) permitió concretar objetivos importantes en los que han estado trabajando los casi 4 000 afiliados, fundamentalmente la capacitación y el rescate de la cocina regional y cubana.
Algo que favorecerá estos objetivos es el traslado de la sede la institución (La Casa del Chef) y el aula de superación, ambas en la calle República, para las cercanas instalaciones del restaurante La Criollita, lo cual está en fase de aprobación por instancias gubernamentales.
De concretarse este deseo, los cocineros camagüeyanos dispondrían de amplios locales, además del salón principal, para demostrar sus habilidades profesionales, entre comensales locales y foráneos.
Luego de remodelaciones necesarias tendrían la verdadera aula laboratorio que desde hace tiempo requieren para desarrollar sus numerosos cursos de superación que imparten a cocineros del turismo, la gastronomía estatal y privada, hospitales, escuelas, unidades militares y otros colectivos con comedores.
Uno de los acuerdos más importantes al debatir el informe de lo realizado fue incrementar la incorporación de más mujeres a la Asociación, el incremento de la capacitación mediante cursos, talleres, conferencias y otras formas, para lo cual estrecharán vínculos con profesores de la carrera de Ciencias Alimentarias, de la Universidad de Camagüey.
Fueron ratificados en sus cargos para los próximos cuatro años a Danoris Hernández Lafita como presidenta; Maikel Martínez Liriano, vicepresidente primero; y Steve Willian Ballester Peña, presidente. La nueva secretoria ejecutiva es Mirian Lazo Alarma. Como adjuntos fueron aprobados Pablo Carmona Rodríguez, Eddelisa Molina López y Yolanda Díaz Sardiñas.
Eddy Fernández Monte, presidente de la Federación de Asociaciones Culinarias de la República de Cuba (FACRC) resaltó que en el reciente Encuentro nacional de técnicas comerciales del Ministerio de Comercio Interior (MINCIN), Camagüey fue la provincia que tuvo más impacto en su participación, con platos típicos e iniciativas diversas.
Sobre las relaciones con la Universidad acotó que la cocina tiene de ciencia, de química de física… “ necesitamos que nos asesoren” y hacer elaboraciones conjuntas entre ambas entidades.
Orientó también a investigar sobre la historia de la cocina camagüeyana, con la ayuda de la Oficina del Historiador de la Ciudad de Camagüey (OHCC), y confeccionar un libro al respecto, de autoría individual o colectiva.
Resaltó que Camagüey está entre las provincias con mayor cantidad de profesores de experiencia, que en otros tiempos llevaron sus conocimientos a otras regiones cubanas, y que ahora tienen grandes posibilidades de llegar más a la base: restaurantes, cafeterías, comedores obreros y donde quiera que exista un cocinero.
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